Existen dos integrantes del Andorra, oponente del Nàstic de Tarragona este domingo, que poseen un profundo conocimiento sobre el equipo grana. Se trata de Beto Company y Manel Royo, quien es tanto entrenador como futbolista del club cuyo propietario es Gerard Piqué, y que en esta temporada se ha establecido como un fuerte competidor del conjunto tarragonense en la lucha por el ascenso.
A principios de este año, el club andorrano figuraba entre los principales candidatos para lograr el ascenso directo, gracias a uno de los presupuestos más altos y una de las plantillas más sobresalientes, apoyados por la asistencia derivada del descenso sufrido en la campaña anterior. Actualmente, el Andorra ocupa la quinta posición y ha experimentado solo una derrota en su estadio hasta el momento en esta temporada. Un rival que lleva consigo una esencia tarraconense.
Beto Company actúa como el actual director técnico del Andorra, después de haber asumido su puesto en el banquillo durante el verano pasado. Su llegada no fue en calidad de entrenador principal, sino como asistente de Ferran Costa. En su momento, Company, antiguo director de clubes destacados de la provincia, como el filial del extinto CF Reus Deportiu, la Pobla de Mafumet, la Rapitenca y el Amposta, tuvo la oportunidad de tomar las riendas del equipo el 20 de enero de 2025, tras la decisión del club andorrano de destituir a Costa.
Unos meses después de su nombramiento, Company ha demostrado ser un entrenador plenamente capaz de dirigir a uno de los equipos más influyentes en la Primera RFEF. El técnico de Valls ha dejado su impronta asociativa, alineándose con los objetivos que Gerard Piqué tiene para su Andorra. De hecho, Company ya ha experimentado el sabor de la victoria ante el Nàstic con el Andorra. Esto ocurrió en la Copa de Catalunya, cuando logró conquistar el Nou Estadi con un resultado de 0-2 en los cuartos de final de dicho torneo.
Es verdad que el propósito de luchar por el ascenso directo se presenta casi inalcanzable, sin embargo, las posibilidades de acceder a los play-offs son firmes, y en ese contexto el equipo andorrano genera un respeto significativo, pues cuenta con una estrategia clara y suficientes individualidades para derrotar a cualquier adversario.
No solo Beto Company trae consigo la esencia tarraconense al Andorra. Durante el reciente mercado de invierno, el club andorrano decidió incorporar a Manel Royo. El lateral izquierdo originario de Alcanar dejó su experiencia en los Países Bajos —donde jugaba en el NAC Breda de la Eredivisie— y se unió a uno de los proyectos más ambiciosos, tanto deportiva como económicamente, de la Primera RFEF, regresando así al fútbol español.
Royo, regresando tras una lesión
Royo, quien ha manifestado abiertamente su apoyo al Nàstic y ha expresado su deseo de ostentar la camiseta grana en el Nou Estadi, experimentará un partido significativo a nivel personal, aunque desconoce si contará con tiempo de juego. Posteriormente a su incorporación al equipo andorrano, sufrió una lesión en el gemelo interno de su pierna izquierda durante una práctica a finales de febrero, lo que le mantuvo alejado del campo durante aproximadamente ocho semanas.
Por esta razón, ha conseguido acumular un total de únicamente 84 minutos. En realidad, su última aparición en el campo fue el 15 de febrero frente al Barakaldo, en un encuentro que concluyó con una victoria para el equipo andorrano por 2-3. Sin embargo, el destino podría tener una grata sorpresa reservada, ya que su retorno, tras varias semanas de ausencia, se produce contra uno de los clubes que más le apasionan. Es un equipo con el que no ha tenido la oportunidad de jugar, pero al que siempre ha seguido de cerca, incluso cuando ha competido fuera de España.
Albert Company y Manel Royo están dispuestos a arruinar las aspiraciones de un Nàstic que busca asaltar Andorra y continuar soñando con el milagro del ascenso directo. Sin embargo, la meta más inmediata es vencer a un competidor directo por el play-off.