El Burgos obtuvo este sábado un empate incierto contra el Cádiz, que en un remate final, gracias a un gol de Roger Martí, logró rescatar un punto cuando parecía haber perdido cualquier esperanza, aunque esto no contribuye significativamente a su búsqueda de la permanencia.
Los burgaleses han alcanzado ya ocho encuentros sin sufrir una derrota. Sin embargo, la sensación al sonar el silbato final es de haber dejado escapar una valiosa oportunidad para asegurar su salvación frente a un rival directo, en un El Plantío que fue nuevamente afectado por la lluvia.
El encuentro comenzó con gran intensidad en El Plantío, pero rápidamente se transformó en un intercambio constante de jugadas donde ninguno de los equipos logró imponerse con claridad, aunque el Cádiz mantuvo una presión efectiva que generó molestias al Burgos.
Las oportunidades más claras durante la primera mitad estuvieron equilibradas: David González fue el primero en tener una ocasión para el Burgos con un tiro centrado, mientras que Fer Niño falló una oportunidad clara frente al portero. Por otro lado, el Cádiz respondió con una gran acción individual de De la Rosa, que fue bien interceptada por Cantero, pero el ritmo del partido disminuyó poco después, dando paso a minutos de posesiones ineficaces y poca intensidad en el juego.
Cuando todo parecía indicar que se irían al descanso sin goles, Rubén Sobrino abrió el marcador para los visitantes tras un tiro libre mal defendido por el Burgos. Sin embargo, la reacción del equipo local fue inmediata, y Marcelo Expósito logró igualar con un golpeo preciso tras un buen centro de Sancris.
Con un empate 1-1 al finalizar la primera mitad, el partido quedó completamente abierto para una segunda parte que reflejó la primera, carente de intensidad y marcada por dos goles generados por esta falta de ritmo, influida también por la lluvia y el mal estado del terreno de juego.
La situación del césped impidió que el Cádiz anotase un segundo gol, tras una jugada en la que Climent se desmarcó por la banda derecha y envió un pase a Matos en el segundo palo. Sin embargo, el mal estado del campo hizo que el balón se detuviese y no llegara a Matos.
A pesar del caos en el terreno, el Burgos logró completar su remontada con un gol de David González, quien aprovechó un error en la defensa del Cádiz. No obstante, la respuesta del Cádiz fue rápida en una jugada casi de fútbol barro: Roger Martí empató tras un córner, beneficiándose de un balón que se detuvo en el agua, facilitando su control y posterior disparo ante un Cantero superado.
En los últimos minutos, ninguno de los equipos fue capaz de crear más peligro, y el partido culminó con un empate justo, más influenciado por las condiciones climáticas adversas que por el propio juego desplegado.