Mbappé recibió un castigo leve y solo fue penalizado con un encuentro tras su expulsión en el partido contra el Real Madrid.
Se trató de una falta increíble que le otorgó la primera tarjeta roja de su trayectoria en el club Merengue. Antes de finalizar la primera mitad frente al Alavés, el destacado jugador francés dejó al Real Madrid con un jugador menos. La preocupación de la directiva blanca se centraba en la posibilidad de un castigo riguroso, pero Kylian Mbappé únicamente fue sancionado con un partido de suspensión.
La Comisión Disciplinaria impuso una jornada de inhabilitación a Kiki. La justificación publicada para evaluar la sanción indicó que fue una falta que ocurrió “de forma violenta en el contexto del juego o como resultado inmediato de alguna situación del mismo”.
Ante esta situación, Carlo Ancelotti y el resto del equipo Merengue pudieron respirar con alivio. El propio Mbappé no participará el domingo frente al Athletic de Bilbao. No obstante, estará disponible para la final de la Copa del Rey programada para el sábado siguiente contra el Barcelona.