Llegamos a la séptima jornada de este competitivo grupo C de la clasificación asiática para el Mundial de 2026, en la que los equipos de Arabia Saudí y China se enfrentarán por la obtención de tres valiosos puntos en la contienda por el deseado segundo puesto que garantiza el avance directo.
Por un lado, el equipo local, que posee la misma cantidad de puntos que su oponente, se encuentra en la posición 59 del ranking de FIFA, con altas expectativas de conseguir los tres puntos en su estadio, tal como lo hizo el mes pasado en septiembre de 2024 en su visita a China, donde logró su única victoria en la competencia. Su principal argumento será la calidad del equipo, ya que, a pesar de jugar en casa, esto no garantiza el éxito, considerando que aún no ha logrado una victoria ante su público tras haber disputado tres encuentros como local, donde solo ha registrado dos empates y una derrota ante el líder Japón.
En lo que respecta al equipo visitante, la selección china ocupa la 90ª posición del ranking y cuenta con un nivel de jugadores inferior, pero ha obtenido resultados recientes más positivos que podrían incrementar su confianza para este enfrentamiento. En efecto, las victorias sobre Indonesia y Baréin, siendo esta última un partido fuera de casa, han generado una mejor sensación en el equipo rojo, y parece que el estadio no influye significativamente, dado que en la segunda ronda también logró puntos ante Singapur y Tailandia; solo ha sucumbido ante los equipos más fuertes de Asia.