Logra el Betis Deportivo un valioso y trabajado empate en casa del filial madridista. En un partido que se decidió en los últimos compases, empataron a uno. El gol inicial fue anotado por Lorenzo en el minuto 82, y el bético logró el empate gracias a Destiny y su cabezazo en el minuto 87, tan solo cinco minutos después.
En su lucha por mantener la posesión y dominar el centro del campo, ambos equipos protagonizaron un toma y daca durante la primera parte. En el encuentro, hubo instantes en los que el equipo local dominaba el partido y otros en los que los verdiblancos llevaban la batuta; aun así, poco hay que destacar de unos primeros 45 minutos que finalizaron con un empate a cero en el marcador. El partido cambió de marcha ya en la segunda mitad, y el Madrid, entrando con mejor pie al encuentro, tuvo la primera oportunidad clara. Penalti a favor del conjunto blanco en el minuto 59, pero Gonzalo no pudo materializarlo debido a que un enorme e imponente Guilherme le adivinó el tiro. Ambos goles llegaron ya con el encuentro casi terminado, cerrando así un partido de gran calibre entre las filiales.
Parecía haber dado con la clave Arzu. El técnico español quedó satisfecho con el trabajo realizado por sus chicos tras la última victoria en casa y eso se ha visto reflejado en el once inicial de hoy. Los mismos jugadores que en la jornada pasada repiten exactamente. Guilherme, el luso, dueño y señor de la meta verdiblanca, nos deleitó la pasada jornada con paradas al alcance de pocos en portería. A Ángel Ortiz lo encontrábamos en el lateral derecho en la zona más defensiva, siendo acompañado en el eje central de la zaga por Rudy Kohon y Sergio Arribas. Lucas Alcazar se posicionaba para terminar con la zona más atrasada del filial bético. Observábamos un cambio de dibujo en el centro del campo, optando esta vez por un doble pivote conformado por C. Seguido por Mateo Flores en la mediapunta, Guirao e Ismael Barea ejercen como enganche con la delantera. El tridente ofensivo es ampliamente conocido. Souleymane se colocaba en la banda derecha, Jesús Rodríguez, quien fue recientemente renovado, se posicionaba en la banda izquierda, y como referencia en la punta de ataque estaba Marcos Fernández.
El colegiado dio el pitido inicial en Valdebebas y el partido comenzó. Los verdiblancos tuvieron un muy buen comienzo. Con una gran circulación de balón y precisión en los pases, lograban acercarse a la portería local, aunque con poco peligro. El encuentro comenzó con un ritmo vertiginoso, esta vez guiado por el RM Castilla. Aprovechando los espacios en la defensa visitante, lograron sacar el primer tiro a puerta, lo que llevó a Guilherme a realizar su primera parada.
Los hombres del centro del campo eran los protagonistas del partido. El equipo local realizaba muchos pases, madurando las acciones hasta hallar una oportunidad de peligro y así causar daño al Betis Deportivo, que necesitaba mantener la posesión y poder respirar ante tantas intentonas madridistas.
Después de transcurrido el ecuador de la primera mitad, el esférico parecía ser nuevamente dominado por el club verdiblanco. Los de Arzu querían recuperar la posesión y ejecutaban su característico juego por las bandas, buscando generar espacios en la organizada defensa local, que estaba muy bien estructurada y cerraba cualquier hueco o oportunidad de peligro hacia su portería.
A cinco minutos del final, Gonzalo organizó un contragolpe en el que demostró su rapidez al dejar atrás a Rudy Kohon. Al llegar al área, recortó y disparó hacia el palo izquierdo, pero un atento Guilherme, que cubría bien la portería, evitó el primer gol local con una gran parada.
Con un balance positivo para los béticos, terminaba la primera mitad tras dos minutos de añadido y ocasiones del filial blanco. La igualdad era máxima con un empate a 0. Aunque el Madrid llegó un poco más, el Betis defendió con todo, manteniendo la posesión en muchos momentos y corriendo hacia la portería rival cuando fue necesario, creando problemas a la defensa blanca.
La segunda mitad empezó con una dinámica similar a la inicial: ambos equipos continuaban intentando imponerse de manera equitativa con idas y venidas, pero sin éxito en concretar. El juego daba la impresión de ser un correcalles donde uno atacaba primero y el otro respondía en la jugada siguiente, alternando sus ataques y creando oportunidades para que ambos equipos pudieran adelantarse en el marcador.
La presión del Madrid estaba provocando errores en la salida de balón bética pasados unos minutos, algo impropio del equipo de Arzu, quienes en esas situaciones se suelen mostrar muy seguros. El equipo local avanzó en el partido, destacándose más en la segunda mitad y asumiendo toda la responsabilidad ofensiva del encuentro. Llegada tras llegada, esto provocó inevitablemente la primera gran oportunidad de peligro del encuentro. En el minuto 59, tras un centro de Yusi Enríquez, el balón impactó en el brazo izquierdo de Marcos Fernández. Este jugador había retrocedido para defender y, al cometer el error, ocasionó la sanción del penalti.
El capitán blanco fue el encargado de lanzar desde los once metros. Gonzalo colocaba el balón, y tras coger carrerilla, lanzó el penalti bajo y seco hacia la izquierda. Después de unos momentos de incertidumbre, Guilherme salvó nuevamente a su equipo. El portugués se lanzó hacia su derecha, deteniendo el balón, y pidió silencio a todos los aficionados locales que ya se imaginaban que su equipo se ponía por delante en el marcador.
Aprovechando la efervescencia que otorga el parar un penalti, el equipo visitante decidió agitar el partido con cambios realizados por Arzu en el minuto 65 de juego. En este caso, Jesús Rodríguez fue el primer sustituido, ya que debido a las constantes marcas que tenía encima, tuvo su mejor partido. En su lugar, entró Destiny. Ismael Barea fue también sustituido por Dani Pérez. Posteriormente, en cuestión de unos minutos, el técnico verdiblanco realizó más cambios en el banquillo. En esta ocasión, los jugadores sustituidos fueron Ángel Ortiz, Marcos Fernández y Mateo Flores. Para reemplazarlos, entraron al campo Pablo Busto, Pablo García y Nobel Mendy, quien tras completar toda la pretemporada con el primer equipo, sufrió una lesión y regresó a los terrenos de juego con el filial.
El primer gol del partido llegó a ocho minutos del final, cuando parecía que el empate estaba asegurado. En el minuto 82, Loren Zuñiga se infiltró entre los centrales y consiguió disparar. El portero luso logró repeler el tiro, pero el rebote cayó en los pies de Lorenzo, quien llegó como un rayo y con gran habilidad definió, marcando el 1-0.
Cinco minutos después del gol del equipo local, el Betis Deportivo se recuperó de la mejor manera posible. Desde la banda izquierda, Lucas Alcazar lanzó un centro preciso al corazón del área. Destiny, al buscar y encontrar su espacio, conectó un potente cabezazo, imposible de detener para el guardameta local. El balón terminó en el fondo de la red y así se puso el empate en el marcador. Minuto 87 y el encuentro está 1-1. El colegiado hizo sonar su silbato tras añadir cinco minutos y el partido finalizó con un empate a uno.